Todos sabemos perfectamente que el oro y el platino son dos metales nobles diferentes. ¿Pero cuales son las diferencias fundamentales?
Comenzaremos con la más fácil de reconocer: La principal diferencia es que el oro blanco no tiene un color blanco puro sino amarillo pálido.
1. El oro blanco tiene 18 quilates (Ktes.),o lo que es lo mismo, tiene tres cuartas partes (750mm.) de oro puro (o fino y por tanto amarillo) y una cuarta parte (250mm.) de otros metales como plata, paladio … que lo emblanquecen pero no hasta el punto de convertirlo en un blanco como el que tiene el platino, que es blanco en sí mismo.
Así pues, para que el oro blanco tome ese color blanco platino hay que darle un baño de de rodio. De esta manera, a la vista, no es nada fácil diferenciarlo del platino. Pero esto implica que con el uso y con el roce, inevitablemente, el baño se irá y amarilleará. Aparecerá su color natural, un amarillo blanquecino o un blanco amarillento , como prefiráis decirlo.
Por lo general, donde más se nota ese roce es por la parte de abajo de la sortija excepto en las alianzas que, al girar sobre sí mismas, se rozan por todos los sitios y es más obvia la necesidad de rodinarla. Cuando eso ocurra no tenéis más que traérnosla y nosotros la puliremos y rodinaremos para que os quede como nueva. Es parte del mantenimiento normal de un anillo de oro blanco. En contrapartida, una sortija de platino tan solo habrá que pulirla.
2. La segunda diferencia es el peso. El platino es más ¨denso¨ que el oro y pesa aproximadamente un 50% más que el oro. Con experiencia, simplemente sopesando una sortija, sabríamos que es platino solo por el peso.
3. La tercera es que el grado de fusión es bastante más alto que la de el oro siendo bastante más difícil de trabajar. Solo los joyeros con gran experiencia lo saben trabajar bien, siendo casi una especialidad en el campo de la joyería.
4. El platino da valor a la sortija
Cualquier modelo de sortija o alianza se puede hacer en oro blanco o platino. Solo depende de lo que prefieras y nos pidas.